Más que cualquier otra industria, el desarrollo de software se mueve a un ritmo increíble, con nuevos avances cada día. En una industria que evoluciona rápidamente y avanza continuamente, seguir siendo competitivo es fundamental, y la I+D es la clave. Hoy en día, las empresas invierten más que nunca en I+D. La necesidad de I+D es cada vez mayor en el ámbito de los productos de software. En una reciente encuesta realizada por Deloitte entre empresas centroeuropeas, el 52% de los encuestados afirmó que sus empresas destinarán más presupuesto a I+D en los próximos uno o dos años y, a largo plazo, el 67% tiene previsto hacerlo.
¿Qué es el I+D?
La I+D es una investigación con el objetivo de conseguir algo nuevo, un descubrimiento que dará lugar a un nuevo producto o servicio, o que mejorará o potenciará una oferta existente.
Las actividades típicas de I+D incluyen las siguientes:
- Diseñar y desarrollar nuevos productos con mayor eficacia o funcionalidad
- Desarrollar mejoras de los productos existentes
- Diseñar y desarrollar nuevos métodos de testeo
- Desarrollar tecnologías mejoradas
- Desarrollo de procesos automatizados para mejorar la eficiencia
- Desarrollo de software para la mejora de productos o procesos
Cada día salen al mercado nuevos programas informáticos en todos los nichos. Es el resultado de los creativos con grandes ideas nuevas y de los ingenieros de software que pueden convertir esas ideas en software innovador. Las empresas que invierten en I+D de software obtienen una ventaja competitiva, sirven mejor a los clientes, obtienen el reconocimiento como líderes del sector y atraen la experiencia humana que hace avanzar a una empresa.
Beneficios del I+D
Ser el primero en desarrollar nuevos productos o procesos innovadores puede ayudar a establecer su empresa como líder en su campo. A su vez, esto puede atraer a nuevos clientes, así como a los mejores talentos que ayuden a su empresa a crecer y a alimentar nuevos avances. A mayor escala, las innovaciones tecnológicas también tienen el poder de provocar un cambio positivo en todo el mundo.
La investigación y el desarrollo son muy vitales para cualquier organización y su futura sostenibilidad. Cuanto más se investigue antes de desarrollar el producto, mayores serán las posibilidades de que el producto sea más robusto y duradero.
Como hemos comentado, los conocimientos adquiridos durante la fase de Investigación y Desarrollo se utilizan para desarrollar nuevas soluciones, mejorar y modificar los productos, servicios y procesos empresariales internos y externos existentes. Además, los investigadores de I+D hacen un seguimiento de las tendencias actuales del sector y le ayudan a implementarlas en su proyecto. El equipo de I+D también tiene siempre en cuenta las tendencias futuras y los posibles requisitos para crear productos con visión de futuro.
La I+D puede conducir a la reducción de costes, encontrando métodos de trabajo más eficaces. Además, la I+D abarca el análisis de los competidores e identifica sus puntos débiles. Este análisis le permite determinar las direcciones para crear un producto o servicio único que le distinga de otras empresas de su sector y aumentar su cuota de mercado.
Cualquier buena idea no se convertirá en una solución eficaz y competitiva sin la investigación necesaria. Por eso, si quieres crear un producto de software exitoso y único, debes prestar atención a la etapa de Investigación y Desarrollo (I+D).